Es 'muy difícil' curar la obesidad

José Miguel Perea, profesor de la Universidad Complutense de Madrid,afirmó hoy que es "muy difícil" curar la obesidad y señaló que la mejor solución "para la epidemia del siglo XXI" es la prevención desde la infancia instaurando en los niños hábitos de vida saludables como una dieta equilibrada y la práctica continuada de ejercicio físico.


El 26,3% de los individuos de entre 2 y 24 años padecen sobrepeso u obesidad. Este dato se traslada a los niños y adolescentes que han aumentado su peso en los últimos años a causa del desarrollo tecnológico que ha contribuido al descenso de la práctica de deporte y al aumento de actividades sedentarias.

Así, el uso de la televisión, ordenador y videojuegos reduce las horas dedicadas a practicar ejercicio físico. Hábitos como ir andando al colegio deben ser potenciados, así como las actividades deportivas extraescolares.

Asimismo, existen diversos factores externos que influyen en la obesidad de niños y adolescentes como el acceso a alimentos "ricos" en grasas, malos hábitos de la familia que por falta de tiempo cocinan alimentos rápidos y prefabricados "no saludables" en la alimentación de los más pequeños. Además, la poca educación o información que reciben los niños producen que tengan una idea errónea de la alimentación.

MENOS DE DOS HORAS FRENTE A TV

Los expertos recomiendan que los niños y adolescentes pasen menos de dos horas frente a una pantalla.

Asimismo, por edades, el estudio observa una clara tendencia en aumento con la edad. El 43% de los niños de 14 a 16 años pasan más de 2 horas ante las pantallas. En cuanto a los hábitos de movilidad, los niños de 5 a 16 años se desplaza en un 57,8% andando, un 18% utilizan transporte público y el 23,3% en automóvil o moto y sólo un 0,9% en bicicleta.

Es curioso, que cuanto más aumenta la edad de los niños, existe una tendencia a reducir las actividades deportivas. Esto se debe, según el profesor de la Complutense, a que los jóvenes tienden a imitar a los padres y además porque el deporte "no está de moda en esas edades".

Es necesario extremar las alertas en la etapa adolescente, especialmente a partir de los 11 años, período en el que los hijos empiezan a ser más sensibles a la influencia de los factores externos que influyen en el sobrepeso y obesidad.